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Fotos: Karmele |
Turquía: ese fue el destino de un pequeño viaje que hice en Abril. Por fin encuentro un momento para poder compartir en el Blog EKO la intensa experiencia gastronómica que vivimos allí.
Como en muchas otras partes del mundo, incluido este país en el que vivimos, allí en Turquía la comida es mucho más que una necesidad a cubrir. Siempre se comparte el momento de la comida con los amigos, con la familia, con seres queridos, convirtiéndose así en una especie de celebración de la vida. Su cocina es social, un clarísimo ejemplo de slow food y en el que los ingredientes que se utilizan siempre son de temporada (¿nos suena esto de algo? jejeje). Allí todo el mundo es "localívoro", degustan alimentos que han pasado rápidamente de la tierra a la mesa, con lo cual conservan toda su frescura y sabor.
Mis amigas y yo damos fe de que en Turquía "...los kebabs son suculentos, las yaprak dolmasi (hojas de parra rellenas) recubren arroz sutilmente especiado, los platos de meze se elaboran cada día con los mejores ingredientes de temporada, el pescado recién capturado se cocina con pericia a la brasa y se sirve sin adornos acompañado de ensalada fresca, y la famosa bebida turca animada, el raki, y delicados vasos de fuerte çay se combinan con baklava bañado en miel y relleno de orondos pistachos de Gaziantep..." (Lonely Planet).