PARMIGIANA DE BERENJENA Y CALABACIN

Esta receta la encontré en otro blog, El Comidista (muy recomendable).  Aquí os escribo mi versión, ya le he hecho un par de veces y está para chuparse los dedos...

La parmigiana lista para ser comida

Ingredientes:

Calabacín

Berenjena

Tomates maduros

Cebolla

Morcilla

Queso para gratinar

(las cantidades no son lo mío, yo cocino con lo que tengo...)

Elaboración:

Primero hacemos una salsa de tomate. En una sartén pochamos la cebolla y cuando ya está blandita (se ve transparente) echamos el tomate (que previamente habremos troceado). Echamos sal al gusto y dejamos que se vaya haciendo, a fuego medio. Yo considero que se ha hecho cuando el tomate está deshecho. En ese momento lo pasamos con la batidora (o un chino para que la salsa quede mejor) ¡y listo! Salsa de tomate rica rica...

Partimos tanto el calabacín como la berenjena en rodajas de un centímetro aproximadamente. Las rodaja de berenjena las dejamos una media hora, 40 minutos al aire para que pierdan su amargor (truco aprendido recienemente). Las pasamos por la sartén, un poco, para ablandarlas un poco (esto para todas, las de calabacín y las de berenjena).

Ahora que lo tenemos todo preparado, vamos precalentando el horno (a unos 200º). En una fuente para horno vamos colocando según nos apetezca las rodajas de calabacín, la berenjena, la morcilla (que también hemos partido en rodajas, y previamente le hemos quitado la piel) y el queso de gratinar (o el que nos apetezca) y para terminar eso si, el queso, para que salga del horno con ese aspecto tan tan apetecible.....

Morcilla dentro de la parmigiana

Después de unos 20 minutos (aunque esto dependerá de cantidades, supongo) en el horno, y con el golpe final de gratinado (temperatura a tope durante unos 5 minutos) el plato está listo.