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| Foto: la he hurtado de Internet ;-). |
El domingo pasado, 7 de Julio, se celebró en Mungia el día del SUKALKI, que año tras año cierra las fiestas de San Pedro.
Es una fiesta muy querida en el pueblo que consiste básicamente en disfrutar de un día al aire libre cocinando y comiendo este guiso tan típico y tradicional de la gastronomía vasca.
Una de las peculiaridades es que ese día, para participar en el concurso gastronómico que se celebra, se debe hacer al estilo tradicional - tradicional, con fuego. Mungia huele a humo desde bien prontito, ya que cuadrillas y familias se ponen manos a la obra casi desde que sale el sol. Y así se van haciendo los guisos, a fuego lento.
Este año no he podido participar, pero desde que vivo ahí intento no perdérmelo. Me gustan mucho este tipo de fiestas diurnas, que mantienen vivas estas rezetas y esta forma de cocinar. Aquí va la rezeta, que la he sacado de este blog.
Ingredientes (para 4 personas):
600 gr. de morcillo de ternera
1 cebolla
3 patatas
150 gr. de zanahorias
1 puerro
3 pimientos choriceros
un litro de caldo de carne
aceite de oliva virgen extra
perejil (opcional), sal y pimienta.
Elaboración:
Cortamos las piezas de morcillo en cuadrados. Calentamos una cazuela con un chorro de aceite. Salteamos la carne sin salar a fuego fuerte y dejamos que se cocine por todos los lados. Cortamos la cebolla y el puerro en juliana y las zanahorias en rodajas, y agregamos a la cazuela junto a la carne. Salpimentamos ligeramente y dejamos que se cocine durante 15 minutos.
Añadimos los pimientos choriceros abiertos y sin pepitas, dejamos rehogar cinco minutos y cubrimos la cazuela con el caldo. Dejamos que cueza durante dos horas, añadiendo más caldo si fuera necesario.
Pasado ese tiempo separamos y reservamos la carne, y trituramos las verduras con el caldo. Disponemos en una cazuela la salsa resultante junto a la carne y las patatas, cortadas en rodajas de un centímetro, y dejamos que cueza a cazuela tapada durante 30 minutos o hasta que las patatas estén cocinadas. Rectificamos de sal y servimos, si lo deseamos, espolvoreado con perejil picado.
Una de las peculiaridades es que ese día, para participar en el concurso gastronómico que se celebra, se debe hacer al estilo tradicional - tradicional, con fuego. Mungia huele a humo desde bien prontito, ya que cuadrillas y familias se ponen manos a la obra casi desde que sale el sol. Y así se van haciendo los guisos, a fuego lento.
Este año no he podido participar, pero desde que vivo ahí intento no perdérmelo. Me gustan mucho este tipo de fiestas diurnas, que mantienen vivas estas rezetas y esta forma de cocinar. Aquí va la rezeta, que la he sacado de este blog.
Ingredientes (para 4 personas):
600 gr. de morcillo de ternera
1 cebolla
3 patatas
150 gr. de zanahorias
1 puerro
3 pimientos choriceros
un litro de caldo de carne
aceite de oliva virgen extra
perejil (opcional), sal y pimienta.
Elaboración:
Cortamos las piezas de morcillo en cuadrados. Calentamos una cazuela con un chorro de aceite. Salteamos la carne sin salar a fuego fuerte y dejamos que se cocine por todos los lados. Cortamos la cebolla y el puerro en juliana y las zanahorias en rodajas, y agregamos a la cazuela junto a la carne. Salpimentamos ligeramente y dejamos que se cocine durante 15 minutos.
Añadimos los pimientos choriceros abiertos y sin pepitas, dejamos rehogar cinco minutos y cubrimos la cazuela con el caldo. Dejamos que cueza durante dos horas, añadiendo más caldo si fuera necesario.
Pasado ese tiempo separamos y reservamos la carne, y trituramos las verduras con el caldo. Disponemos en una cazuela la salsa resultante junto a la carne y las patatas, cortadas en rodajas de un centímetro, y dejamos que cueza a cazuela tapada durante 30 minutos o hasta que las patatas estén cocinadas. Rectificamos de sal y servimos, si lo deseamos, espolvoreado con perejil picado.
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