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Fotos: Karmele |
Las ensaladas también son para el invierno y esta es una excelente combinación.
Ingredientes:
- 1 escarola
- 1 naranja
- nueces
- aceite de oliva
- crema de módena
Elaboración:
Limpiamos, troceamos la escarola y reservamos.
Pelamos la naranja y separamos los gajos, quitamos la parte blanca y cortamos en trocitos.
Colocamos la escarola en un bol, añadimos las naranjas troceadas y las nueces, aliñamos al gusto, yo puse un poco de crema de módena y un buen chorro de aceite de oliva.
Las ensaladas son, en general, una forma de consumir alimentos muy beneficiosa para nuestra salud. Y la receta de hoy particularmente.
La escarola, cuyo consumo ya aparece en la cena del pueblo de Israel la noche anterior de su huída de Egipto, tiene un efecto eficaz contra la fiebre y su consumo es beneficioso para las funciones del estómago. Contiene fibra, vitaminas A, C, B1, B2, es rica en minerales ( potasio, calcio, fósforo, hierro ) y contiene niacina y ácido ascórbico. El 94% de su contenido es agua, por lo que es muy baja en calorías, resultando idónea para dietas de adelgazamiento además por su efecto saciante.
Los cítricos, especialmente las naranjas, ayudan a nuestro organismo a defenderse frente a varias enfermedades infecciosas. El ácido cítrico es oxidante, depurativo y desinfectante. Produce efectos de limpieza y estimulación en las funciones de páncreas e hígado. La naranja contiene diversas substancias que contribuyen a mantener alto el tono vital por mejorar el buen estado general del organismo: calcio, fósforo, hierro, magnesio y vitaminas.
Los frutos secos son alimentos muy energéticos, ricos en proteínas y oligoelementos (indispensables para las funciones fisiológicas). Son ricos en elementos beneficiosos para la salud .Todos ellos contienen cantidades apreciables de vitamina E, de gran poder antioxidante.La ingestión de frutos secos ayuda a prevenir la osteoporosis por su gran contenido en calcio. Recientemente se ha publicado un estudio de la Universidad de Loma Linda, en California, que dice que las personas que toman con frecuencia frutos secos tienen menos probabilidad de padecer obesidad y menor riesgo de padecer síndrome metabólico.
Además de altamente saludable, esta receta resulta muy sugerente desde el punto de vista gastronómico por sus diferentes texturas y contraste de sabores.